Cada día buscan maneras de simplificar la
vida. De tener un día tranquilo y controlar todas las tareas pendientes, pero
resulta ser imposible. A continuación les doy cinco tips sencillos para que sea más fácil organizar.
1.- Anota.
Es
imposible recordar todo. Con tantas cosas por hacer, la única manera de
asegurarse de que no se te olvide algo es tener una “lista de tarea” para hacer
seguimiento de tus pendientes. Además, no hay nada más gratificante que tachar
las tareas que ya has hecho.
2.-No más compromisos.
Está
bien decir “no” de vez en cuando. Como mamás nos queremos sentir súper humanos,
pero debemos ser realista. Debes saber cuál es tu límite y no poner estrés
“extra” que no necesitas. No serás mala madre sino ayudas a organizar eventos
en las reuniones de padres de la escuela o sino inscribes a tu hijo en cada
evento que haya. Relájate.
3.-Código de color.
En
un calendario, señala de diferente color las tareas que les tocan a cada quien.
Es una buena manera para que tus hijos (sin so más grandes) será cuando les
toca sus responsabilidades y lo asociaran creando una rutina.
4.-
Hazlo accesible.
Pon
los artículos que quieres que tu hijos alcancen por sí mismos. Si se tratan de
bocadillos, juguetes, platos o vasos, de esta forma les será más fácil ser
autosuficientes. Y no solo les enseñaras a ser responsables, sino que te libera
al menos por unos momentos para seguir con tu proyecto.
5.-Agenda “Ponerse al día”.
Con
tantas cosas por hacer en el día terminas
“perdiendo el rastro”. Cuando menos lo imaginas ya se juntó la ropa para lavar,
las cuentas, correos electrónicos que debes contestar… Ufff! Encuentra una
tarde libre para ponerte al día (si es necesario contrata a una niñera o pídele
a alguien de confianza que cuide a tus niños
por un momento). Hacer esto periódicamente ayuda a prevenir que pierdas
el control.